Sin lugar a dudas, aquellos que tengan la intención bien de alquilar a medio plazo un inmueble, bien de que se lo alquilen, les interesará conocer el nuevo plan que el gobierno tiene en mente.
Lo cierto, es que tras muchos años de aplicación de la LAU del año 94, con pequeñas retoques normativos a lo largo de este tiempo, siendo sin lugar a dudas la más importante la Ley 4/2013, de 4 de junio, de medidas de flexibilización y fomento del mercado del alquiler de viviendas, que entre las novedades más destacables a nuestro entender, se encontraba la reducción del plazo mínimo exigible que pasaba de 5 años (más un prórroga de 3) a 3 años (y prorrogas anuales), sin que parezca que haya dado los frutos que en primer momento se pretendieron, y que no era otro que animar a los arrendadores a sacar al mercado toda esos inmuebles que mantenían vacíos, y hacerlo por precios accesibles, al contrario, el precio del alquiler en estos últimos años no ha dejado de subir, y en algunas ciudades incluso por encima de los precios previos a la crisis.
En este sentido, el PSOE ya presentó una proposición de Ley en el Congreso para intentar controlar la subida de precios del alquiler, siendo actualmente su intención la de modificar nuevamente la normativa sobre arrendamientos, destacando sin lugar a dudas, el volver a subir el periodo mínimo hasta los cinco años, la manera de actualizar el ipc, o el importe de la fianza, con incentivos como ciertas desgravaciones fiscales para inquilinos y de un cien por ciento para aquellos propietarios cuyo precio de alquiler sea asequible, complementado con otras medidas como la creación de un sistema público de precios de alquiler de referencia por distritos.
Dichas medidas, se verán reforzadas con la agilización de los desahucios, y con ello, la modificación, nuevamente de la Ley de Enjuiciamiento Civil, con ciertas peculiaridades, en aras de intentar proteger al inquilino, como será poner en conocimiento el eventual desahucio a los servicios sociales competentes.
Así las cosas, que habrá que esperar a ver que modificaciones se introducen finalmente con las medidas diseñadas por el gobierno, y su viabilidad, en tanto en cuanto existen numerosos agentes con intereses contrapuestos a la de los propios arrendatarios, de ahí que si está en alguna de dicha posición (propietario o inquilino), sopese si le conviene suscribir un contrato conforme a la normativa actual, o bien esperar a la nueva regulación.